EMPRESASVisto 1428 veces — 14 enero 2020

El terminal concesionado registró un incremento en los volúmenes de transferencia en contenedores y graneles, junto a importantes avances en gestión ambiental.

El gerente general de Antofagasta Terminal Internacional (ATI), Enrique Arteaga, realizó un positivo balance de 2019 en materia operacional y de sostenibilidad. “El esfuerzo, profesionalismo y dedicación para realizar nuestras actividades de la manera correcta, fue la fórmula que nos permitió alcanzar estos positivos resultados. Hemos sido capaces de ser un aporte para el desarrollo de la región y un motor para nuestra ciudad. Es por esto que seguiremos avanzando y trabajando con excelencia que nos caracteriza”, expresó.

El ejecutivo destacó el crecimiento de volúmenes, llegando a los 42 millones de toneladas transferidas. En cuanto al aumento de cargas de proyecto para la minería, demostró su experiencia operacional con maniobras en tándem, descargando locomotoras de más de 120 toneladas y equipos como motores o transformadores.

Otro avance, fue el proyecto que eleva la restricción para las cargas sobre dimensionadas que conectan el puerto con la Ruta 5, que permitió elevar la altura máxima a 4,5 a 8,4 metros para las cargas de importación, agilizando el transporte para la llegada de las principales cargas con sobre dimensión y sobre peso, a los respectivos proyectos mineros de la región.

En materia de sostenibilidad ATI sigue avanzado en gestión ambiental: el pasado 9 de mayo, se certificó en Producción Limpia, tras haber cumplido el 100% los compromisos adquiridos, mejorando la cadena logística minera y las operaciones de embarque y descarga de concentrados de graneles minerales. Adicionalmente, el Terminal fue reconocido por quinto año consecutivo por el programa Huella Chile del Ministerio de Medio Ambiente, recibiendo la certificación que acredita la cuantificación de la huella de carbono, disminuyendo la generación de gases de efecto invernadero (GEI) de las operaciones en un 26% respecto 2018.

Se suma el lanzamiento de la primera Memoria Ambiental 2018, documento que permite conocer los avances alcanzados en gestión ambiental. En cuanto a relacionamiento con la comunidad, ATI como cada año, alcanzó un alto número de visitas a sus dependencias, permitiéndoles conocer las instalaciones y operaciones del Terminal, recibiendo a más de 2 mil personas.

Adicionalmente, se logró implementar el nuevo sistema de iluminación exterior, transformándose en el primer terminal que cumple la norma de emisión para regulación de contaminación lumínica y protección de los cielos astronómicos del norte del país.

“De esta forma, seguiremos buscando nuevos desafíos para seguir posicionándonos como terminal estratégico para el comercio internacional minero, y generar un desarrollo armónico con la comunidad”, apuntó Arteaga.

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