Nuevo instrumento cuenta con 5 ámbitos de acción destinados a la lectura, creación, patrimonio bibliográfico, industria e internacionalización y marco jurídico, siendo una de las principales medidas el Plan Nacional de la Lectura.

Con la puesta en escena de un cuenta cuentos local en pleno café literario de la Feria Internacional del Libro Zicosur, Filzic 2015, se lanzó en la Región de Antofagasta -en el Día Mundial del Libro y el Derecho de Autor- la Política Nacional de la Lectura y el Libro y el Plan Nacional de la Lectura.

La actividad, fue presidida por la Directora Regional de Cultura, Carla Redlich, el Seremi de Educación, Juan Carlos Vega y la Coordinadora Regional de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam), Amy Mayne Nicholls, además de escritores y representantes de entidades ligadas al fomento del libro y la lectura.

En la ocasión, los asistentes pudieron conocer detalles de la Política, que busca crear las condiciones para asegurar a todos los habitantes del país, incluyendo a los pueblos originarios y a las comunidades tradicionales, rurales y de inmigrantes, la participación y el acceso a la lectura, el libro, la creación, el patrimonio y los saberes, protegiendo y fomentando la diversidad cultural y territorial, con equidad e integración social.

“En el Día Mundial del Libro y el Derecho de Autor estamos contentísimos de que una de las propuestas del programa de la Presidenta Michelle Bachelet se haya concretado, como es la Política Nacional de la Lectura y el Libro, 2015-2020, que contempla como uno de sus ejes relevantes el Plan de la Lectura”, expresó la Directora Regional de Cultura de Antofagasta, Carla Redlich.

La Política

Este instrumento se estructura en torno a cinco ámbitos de acción. El primero de estos es la Lectura e incluye la implementación del Plan Nacional de la Lectura, el fortalecimiento de espacios públicos de lectura, propiciar la participación de los medios de comunicación en la difusión de las acciones de fomento lector y el fortalecimiento de las bibliotecas públicas.

En Creación la Política se propone apoyar, promover y difundir la premiación nacional y regional de obras en formato impreso y digital; facilitar el acceso al Fondo del Libro, desarrollar una Política de compra de textos que garantice diversidad en términos de género, pueblos originarios y regiones y vincular los resultados de las becas de creación con iniciativas de fomento lector promovidos por el CNLL, aumentando la dotación de recursos.

En Industria e internacionalización, se incentiva el desarrollo de editoriales, librerías y profesionales del libro, promueve el mejoramiento de la calidad de los libros, fomenta las  ediciones electrónicas y el acceso a contenidos digitales en bibliotecas públicas y estimula la creación y el emprendimiento editorial de los pueblos indígenas.

La Política también se propone investigar, recopilar, conservar y difundir el patrimonio bibliográfico; mientras que en el ámbito Marco Teórico propone modificar la actual Ley del Libro.

El trabajo y los ámbitos de acción de la política fueron destacados por Carla Redlich, quien manifestó que “sabemos que esta política ha sido construida desde las bases a través de mesas del libro en todas las regiones, lo que además aumenta su valor y que las medidas que contempla la política, que también se incorporarán en el plan nacional de la lectura, ayudarán a acercar a muchos más lectores interesados e incentivar a otros que no lo son tanto, para que se acerquen a la lectura a través de las distintas formas además que tiene el libro, ya sea en papel o en formato digital; capacitando a mediadores, formando clubes de lectura y generando diálogos, por lo tanto, creemos que es un escenario propicio para que Chile vuelque y se convierta en un país mucho más cercano a la lectura, mucho más lector de lo que es hasta este momento” señaló.

Plan Nacional de la Lectura

El Plan Nacional de la Lectura 2015-2020 convoca acciones y programas desarrollados por los ministerios Secretaría General de la Presidencia (a través del Consejo Nacional de la Infancia), de Educación y Desarrollo Social, el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (CNCA), la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam) y el Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama). Todas estas instituciones firmaron un convenio de colaboración para la implementación de este instrumento.

Este documento se desarrolla en el marco de Reforma Educacional y consagra que la lectura es un derecho de todos y todas, por lo que pretende favorecer su ejercicio en todos los formatos y soportes. Contempla que durante el periodo 2015-2020 se desarrollarán Planes Regionales de Lectura en las 15 regiones del país.

En este sentido, la Ministra de Cultura, Claudia Barattini, quien también lanzó en Santiago la Política y el Plan, explicó que entre sus metas a largo plazo se incluye “consolidar de aquí al 2020, quince Planes Regionales de la Lectura; incrementar en un 10% la población que declara leer libros en formato impreso; aumentar del veintiséis por ciento  al veintiocho por ciento la población que declara leer libros en formato digital. Y por último, pero no menos importante, mejorar la ubicación que ocupa la lectura entre las actividades habituales en el uso del tiempo libre de las personas”.