CULTURAVisto 1704 veces — 18 abril 2018

Fueron los avatares de la vida, lo que llevó a esta licenciada en Ciencias Biológicas y Máster en Ciencias de la Universitat de Barcelona a descubrir el potencial y beneficios de una planta muchas veces ligada al narcotráfico y los flagelos de la droga. Es que hablar de cannabis en nuestra sociedad pareciera ser un tabú, el cual Karina Vergara enfrenta con investigaciones, y una experiencia personal y profesional que incluso la motivó a escribir un libro.

Su historia comienza con el diagnóstico de esclerosis múltiple a su pareja, y la búsqueda de diferentes tratamientos para esta enfermedad, lo que llevó a Karina a descubrir en Europa el uso de fármacos elaborados en base de la cannabis. Fue así como enfrentó los mitos con la evidencia científica, plasmando sus conclusiones en un blog que rápidamente despertó interés.

Plataforma virtual que sin buscarlo superó todas expectativas de la autora, cuyo revuelo y conclusiones fueron el precursor de su libro “Cannabis Consciente” el cual presentará en Antofagasta, en el marco de la VIII Feria Internacional del Libro Zicosur, Filzic 2018.

 ¿Por qué titulaste tu libro “Cannabis Consciente”?

Intenté buscar una palabra que pudiese integrar los diferentes aspectos relacionados al cannabis. El objetivo principal de Cannabis Consciente es acercar el conocimiento científico existente sobre la planta Cannabis sativa, sus componentes y sus potenciales beneficios medicinales, a quien desee tener un entender consciente sobre este tema. Con consciente me refiero a una comprensión holística e integrada al saber humano, literalmente, Conscientia significa «con conocimiento» (del latín cum scientia). Ya que no sólo debemos conocer lo malo de la marihuana como son los efectos del abuso y el narcotráfico, sino que debemos entender que alrededor de esta planta existen pacientes, médicos, científicos, cultivadores, políticos y activistas que se relacionan de una buena manera a ella y que el cannabis puede haber cambiado sus vidas de forma positiva, eso no lo podemos desconocer.

 ¿De qué forma se inician tus estudios de la Cannabis?

Fue buscando información sobre los diferentes tratamientos que existían para la esclerosis múltiple ya que habían diagnosticado a mi pareja recientemente. Encontré que en Europa estaba autorizado un fármaco en base a cannabis para el tratamiento de la espasticidad en esta enfermedad llamado Sativex y que la seguridad social de España lo entregaba de manera gratuita en caso de resistencia a los tratamientos tradicionales. Además me encontré con un montón de publicaciones científicas en revistas especializadas que concluían que los principales componentes del cannabis, llamados cannabinoides, estaban relacionados a ciertas propiedades terapéuticas como antiinflamatorio, analgésico, broncodilatador, ansiolítico y un largo etc. Si bien la mayoría de estos estudios eran preclínicos, es decir, en animales o células, los resultados eran muy alentadores e invitaban a seguir investigando en el tema. Además, ya existían algunos estudios clínicos realizados con pacientes que demostraban que Sativex era efectivo en el tratamiento de la espasticidad. Mi curiosidad me llevó a querer continuar investigando, pero hacer investigación siempre es difícil, sin embargo apareció Fundación Daya que me ha permitido cumplir un sueño que es hacer investigación en relación al cannabis y sus propiedades terapéuticas.

 ¿Pensaste alguna vez en la repercusión que tendrían tus estudios e investigaciones?

La verdad nunca. En general el trabajo de investigación es de muy bajo perfil y muchas veces no tiene la repercusión social que a los científicos nos gustaría. Pero el cannabis cambia esto un poco y al hacer los estudios que estamos realizando en la Fundación, sabemos que estamos buscando ayudar a la mayor cantidad de gente posible. Ya que cualquier hallazgo en relación a productos farmacéuticos estandarizados de cannabis los podemos relacionar a productos artesanales producidos de manera cuidadosa.

 ¿Cuáles son las mayores trabas con las que te has enfrentado en este recorrido?

El desconocimiento de gran parte de la comunidad médica. Lo malo es que cuando este reconocimiento se relaciona al prejuicio genera una barrera difícil de penetrar, por esto existe mucho médico que dice que no hay ninguna evidencia que relacione beneficio con el cannabis o sus componentes, cuando objetivamente no es así.

 ¿Según tu experiencia, ha crecido el interés de los profesionales e investigadores de la salud por saber y conocer más del uso de la cannabis medicinal?

Afortunadamente sí, sobre todo en las generaciones más jóvenes. Cada vez hay más médicos jóvenes y otros profesionales de la salud que se abren a la posibilidad de conocer más sobre el cannabis y sus usos médicos, y con esta pequeña acción pueden recomendar de manera segura el uso de extractos de cannabis. 

De parte del mundo científico también algunos que se están interesando en ahondar más en la investigación en torno al cannabis, en general cada vez se acercan más personas a la Fundación Daya con ganas de hacer investigación en conjunto, lo que nos pone muy contentos.

¿Cuáles son las condiciones para que en un futuro el uso de la cannabis medicinal sea en mayor escala que la actual?

Principalmente tiene que ser la apertura de mente, pero creo que a medida que los estudios clínicos que se están realizando al rededor del mundo comiencen a mostrar sus resultados, la comunidad médica no seguirá negando los beneficios derivados del uso medicinal del cannabis. Esto permitirá un cambio de mentalidad dejando los prejuicios de lado y hará que más médicos puedan recetar cannabis y hacer un seguimiento seguro de sus pacientes. Por lo que es muy necesario seguir haciendo investigación, ya que además los resultados de éstas serán la base de las regulaciones que se comenzarán a implementar al rededor del mundo.

Además, si se comienza a hablar sobre cannabis, cannabinoides y sistema endacannabinoide en las carreras universitarias relacionadas a la salud permitirá que este cambio de paradigma sea más rápido.

Es importante mencionar que apertura de mente y cambio de mentalidad no sólo tiene que venir del mundo de la salud, sino que de toda la sociedad incluyendo los políticos. Creo que con conocimiento se combaten los prejuicios y eso intento hacer a través del libro.

 ¿Si tuvieses la oportunidad de publicar otro libro acerca del uso de la cannabis medicinal, qué tópicos incluirías?

Un tema que me gustaría incluir mucho son las patologías sin un tratamiento efectivo y que tienen excelente respuesta con el cannabis y sus compuestos. Como por ejemplo el trastorno del espectro autista, durante los últimos años han existido muchas publicaciones que relacionan problemas en el sistema endocannabinoide con esta condición. Por ejemplo un estudio muy reciente indica que los pacientes con este diagnóstico tienen una deficiencia de endocannabinoides, que son cannabinoides parecidos a los encontrados en la planta pero producidos por nuestro cerebro. Lo que produciría los síntomas relacionados al TEA como las dificultades sociales y del habla. 

 ¿Qué puedes adelantar al público que concurrirá a Filzic para conocer de su trabajo?

Me gustaría poder acercar al público al mundo de la investigación de manera simple, en un lenguaje conocido, despertar su curiosidad por el uso medicinal del cannabis y que al finalizar el encuentro puedan hablar sobre cannabis con fundamentos a otras personas para ir abriendo camino.

Compartir

About Author

iphonerodrigo