El VII Informe anual del Observatorio del Narcotráfico de la Fiscalía Nacional publicado recientemente a la comunidad contempla interesantes conclusiones referentes al desarrollo del fenómeno del narcotráfico en la macrozona norte del país, incluyendo la región de Antofagasta y también considera la evolución de los delitos de homicidio entre los años 2011 a 2021 para caracterizar los principales cambios en la década analizada.

El informe comparativo de homicidios fue elaborado por la Unidad Coordinadora del Sistema de Análisis Criminal y Focos Investigativos de la Fiscalía Nacional (SACFI). Un primer dato de contexto es que la población de la Región de Antofagasta aumentó desde los 585.438 habitantes en 2011 a 703.746 en 2021, lo que representa un incremento del 20% de la población regional. Por su lado, los delitos de homicidio consumados en 2011 alcanzaban a 23 casos y el 2021 llegaron a 33, es decir, el aumento general para la Región de Antofagasta es de un 43% dentro de la década.

En términos de variación porcentual de víctimas por cada 100 mil habitantes, se experimentó un aumento desde el 3,9 a 4,7 lo que representa un aumento del 20% de este indicador en 10 años, lo que equivale a un incremento en torno al 2% anual de la década estudiada. Por su parte, el incremento promedio para la macro zona norte es de 7,24 puntos, de modo que nuestra Región se encuentra 2.54 puntos bajo el promedio de este indicador.

Dentro de los tipos de la familia de homicidios, el homicidio simple (91%) y el homicidio calificado (4,1%) representan las mayores participaciones del grupo en el fenómeno.

Desde un punto espacial, la mayoría se comete en la vía pública (52,3%), domicilios (10%) y sitios eriazos (12,3%).

En el caso de la ciudad de Antofagasta, las principales zonas calientes o hot spot son la zona céntrica (aumento de 172%) y además se advierte la aparición de homicidios consumados en los sectores de las faldas de los cerros de Antofagasta desde Avenida Salvador Allende hasta el ex vertedero municipal, caracterizados por sectores de proliferación de tomas, viviendas ligeras con alta vulnerabilidad social y hacinamiento.

Una zona caliente es un sector de la ciudad donde se cometen delitos de manera más intensa que en otros. En Antofagasta, el centro de la ciudad ha presentado un incremento del 172% de homicidios consumados entre el periodo 2011 a 2021.

En cuanto al tipo de arma utilizada en los delitos en la macrozona son: armas blancas (34%) y armas de fuego (46%). Estas últimas experimentan un aumento desde el 24% en 2011 a un 46% en 2021.

Respecto al perfil de los imputados conocidos, el 94% son varones y solo el 6% mujeres. Los rangos etarios predominantes son los autores de 18 a 24 años (33%), seguidos por el tramo de 31 a 55 años (27%) y de 25 a 30 años (18%).

Respecto a los principales fenómenos indicados, es relevante destacar que el 44% de los homicidios se producen en contexto de riña común, el 7% en riña vecinal o laboral y el 26,4% en contexto de ajuste de cuentas. Solo un 3% se produce por disputa de territorio y un 9% en venganza.

Por último, los principales fenómenos emergentes para la macrozona norte son el “ajuste de cuentas” y venganza personal, las llamadas “vacunas”, o sea el cobro de dinero para el desarrollo de una actividad económica en un territorio determinado bajo amenazas, las conocidas “mexicanas” o quitadas de droga y disputas territoriales, como asimismo el sicariato u homicidios por encargo, todos los cuales tienen una baja incidencia estadística, pero emergen algunos casos dentro de los casos analizados.