CRÓNICAVisto 1672 veces — 25 agosto 2015

Alrededor de 100 mil litros de chicha serán comercializados en Antofagasta durante las celebraciones de las fiestas patrias, por este motivo, el Servicio Agrícola y Ganadero, SAG, fiscalizó a los chicheros en el marco del cumplimiento de la Ley de Alcoholes n°18.455.

La actividad se llevó a cabo en el sector La Chimba, donde tradicionalmente se han instalado los productores de chicha que llegan a la capital regional principalmente desde San Felipe y Los Andes (región de Valparaíso) y San Javier (región del Maule), abasteciendo a las comunas de Tocopilla, Mejillones y Taltal, y vendiendo sus productos a otros chicheros, comerciantes, botillerías y expendios de bebidas alcohólicas.

Durante la jornada se tomaron muestras a distintos proveedores con el fin de realizar un rastreo completo de los productos ofrecidos, análisis que durante las próximas semanas determinará si la chicha comercializada cumple con todas las exigencias de la ley y así confirmar que no se encuentra adulterada. Además se fiscalizará la documentación de los comerciantes.

“Este es un operativo que se realiza todos los años en el marco de la fiscalización de la ley 18.455 de alcoholes y que busca principalmente determinar la calidad del producto que será comercializado durante las fiestas patrias”, indicó el Jefe de Oficina SAG Antofagasta, Mario López Lara.

López agregó además que por lo general los productores y comerciantes de chicha que se instalan en Antofagasta tienen un buen comportamiento y son los mismos que llegan año a año a la capital regional.

En tanto Silvia Troncoso, propietaria del Rey Guachaca señaló que “los niños del SAG se portaron muy bien, nosotros no tenemos ningún problema con los resultados de nuestros productos, estamos segurísimos de que pasarán la prueba en un 100%, así que aprovecho de invitar a los antofagastinos a visitar a los chicheros, estamos vendiendo la chicha a un buen precio, sólo dos mil pesos el litro a diferencia de la zona central donde está a 3 mil”.

Dentro de las prácticas no autorizadas y que constituyen infracciones, se pueden mencionar la elaboración de chicha con adición de agua, el uso de endulzantes artificiales no permitidos, la aplicación de preservantes no autorizados y la elaboración de la bebida a partir de materias primas prohibidas, entre otros.

En cuanto a las multas que arriesgan los productores que adulteren sus productos, éstas pueden alcanzar hasta los 2 millones 300 mil pesos.

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