Tras una nueva fiscalización, las salas de cerveza superaron el control que estuvo marcado por la molestia de administradores y locatarios.
Estigmatizadas y muchas veces mal catalogadas, las shoperías o salas de cerveza, son un lugar de mucha concurrencia para loínos y también quienes por trabajo residen en Calama.
Por esta razón, la Gobernación Provincial de El Loa junto al apoyo de Carabineros, inspectores del Servicio de Impuestos Internos (SII), y del municipio, más efectivos de la PDI, cumplieron con realizar una jornada de fiscalización aleatoria a los locales de expendio de alcoholes.
Tras una ronda por parte importante de estos locales, las autoridades fiscalizadoras cumplieron con su rol y solicitar documentos, permisos y realizar controles de identidad a ciudadanos extranjeros que trabajan y ofrecen sus servicios en Calama.
Sorpresa
Y en una grata sorpresa para los fiscalizadores citados –en esta ocasión- no hubo mayores problemas ni faltas a la normativa municipal, tampoco de orden tributario, y tampoco con ciudadanos extranjeros, quienes mostraron sus documentos al día y sin ningún tipo de alcances por parte de la Policía de Investigaciones.
Aunque si hubo un grado de molestia por parte de dueños y administradores, quienes mostraron su descontento por lo que consideran que es una constante por parte de las autoridades.
“Nuestra tarea muchas veces tiene un sabor amargo, y aunque así sea es un deber el controlar y fiscalizar todos los rubros, más cuando tenemos un plan de acción como el Chile Seguro y el Barrio Comercial en Paz, y que nos entregan las herramientas para realizar nuestro trabajo sin exclusión alguna. Pero además, quiero destacar que en muchos casos existen comerciantes y emprendedores que han comprendido el fin de nuestras fiscalizaciones, apoyándolas, facilitando el trabajo de quienes las realizan y siendo un aporte para la seguridad pública”, destaco el gobernador Luis Garrido.
Pese al malestar de algunos, el Programa de Seguridad Pública de la Gobernación, asegura que los reclamos situaciones normales dentro de su accionar, pero que en otros se agradecen y valoran porque es una medida necesaria para garantizar el orden y la seguridad pública de los loínos.


















