Además se desnaturalizó 18 kilos de mercadería en el sector de quesos y fiambre.

Guardias de seguridad sin acreditar su participación en el curso OS10 que les faculta para ejercitar tal rol, fue la debilidad común que presentaron dos supermercados del sector norte de la ciudad –Santa Isabel y Tottus-, que arrojó la fiscalización que realizó en horas de esta mañana, el gobierno provincial, funcionarios de los servicios públicos, inspección municipal, acompañados de personal de Carabineros.

Al respecto, Axel Guerrero, capitán de Carabineros que solicitó la documentación a las empresas a cargos de los sistemas de seguridad en los supermercados, explicó que el curso OS10 es un requisito básico que exige la Directiva de Funcionamiento de Seguridad Privada, cuerpo legal que rige el funcionamiento de las empresas que ofrecen servicios de seguridad.

El oficial, detalló que la situación que presentan las empresas que brindan el servicio a estos supermercados, no es menor, porque hace poco tiempo ya habían sido advertidos por no cumplir con los estándares exigidos.

La listeriosis amenaza

Otro documento que también se extrañó en uno de los supermercados fiscalizados es el Manual de Buenas Prácticas que establece los procedimientos de higiene y al que los profesionales de la salud dan alta importancia porque su buen manejo garantiza la calidad de los alimentos que llegan al consumidor.

Ello explica la rigurosidad de la inspección de los funcionarios de salud y que exigen a los administradores áreas definidas de exhibición, conservación y hasta del lugar donde se almacenan los productos ya vencidos, como carnes, cecinas, quesos y embutidos, porque, se comentó, una refrigeración adecuada evita infecciones como la listeriosis, que se origina por la ingesta de alimentos contaminados. 

Precisamente, parte del balance que dejó la fiscalización sanitaria fue la eliminación de 18 kilos de cecinas, algunos, por no mantener la cadena de frío; y otros, por estar vencidos.