Promover un ambiente familiar, incentivar la unión, el amor y la fraternidad, recuperando así el verdadero sentido de la Navidad, es el principal objetivo de Misión Noche Buena.

La campaña solidaria sobrepasó la meta propuesta este año y reunió más de 2.800 cajas con alimentos  que fueron distribuidos a las familias más vulnerables en vísperas de navidad, entregando la posibilidad de preparar y disfrutar una cena digna en sus hogares en esta fecha tan especial.

El lunes pasado se realizó el cierre de esta campaña solidaria que en la región es encabezada por una alianza entre Fundación CGE, el Arzobispado de Antofagasta, diversas empresas, colegios, instituciones y personas.

Juan Carlos Gómez, gerente regional Elecda y representante de la Fundación CGE, señaló que “Misión Noche Buena ha construido una red solidaria visible y fuerte, que cobra vida y fuerza todos los años mediante este proyecto social que une a tantas personas de diferentes sectores de la comunidad. Queremos agradecer a todos quienes han hecho posible que hoy estemos cumpliendo con el compromiso adquirido con cada una de las familias que esperaban contar con sus cajas de Navidad”.

Por su parte, Luis Montenegro, profesor del Colegio San Agustín, señaló que “a través de Misión Noche Buena hacemos pedagogía en navidad, porque valores como la solidaridad, la unión y fraternidad, así como la capacidad de equipo por sobre el individualismo, pueden enseñarse a través de esta campaña y multiplicarse en beneficio del prójimo y de nosotros mismos”.

Asimismo, la campaña permite a todos quienes participan en ella, a vivir una celebración distinta a través de estas cajas que reúnen un sinfín de virtudes contenidas en las formas más sencillas de ayudar, representando el verdadero espíritu navideño.

Misión Noche Buena que se inicia oficialmente cada año en octubre, permite involucrar a diferentes instituciones, colegios, empresa y familias voluntarias, quienes trabajan intensamente para reunir dinero o víveres con los que llenan dichas cajas.

Monseñor Pablo Lizama indicó que Misión Noche Buena es capaz de producir sentimientos buenos y generosos en el corazón de cada persona, de preocupación hacia los demás y es positivo para quienes reciben la caja de alimentos para hacer una mejor cena y darse cuenta, más allá de esto, que hay personas preocupadas por ellas, siendo fruto del nacimiento de Cristo.

El Arzobispo de Antofagasta bendijo los alimentos, que fueron entregados a 12 familias de forma simbólica, ya que el reparto de víveres se extendió hasta el mismo día 24, en distintas poblaciones, capillas y campamentos de Antofagasta, Calama, Mejillones, Taltal, Tocopilla y poblados como Turi, Ollague y Lasana, entre otros.

Irma Pizarro, una de las beneficiadas con la Misión Noche Buena, sostuvo que fue una muy linda experiencia recibir esta caja porque “a veces no tenemos para celebrar Navidad y es positivo recibir estos aportes para nuestros hijos y las personas que viven con nosotros, es una gran ayuda”, dijo.

Este tipo de acciones ensalzan el espíritu navideño, demostrando como el esfuerzo y el amor otorgan sonrisas más allá de lo material. La oportunidad para estas familias de compartir, brindar y disfrutar de mejor forma la llegada de la Navidad, es sin duda, el mejor de los regalos al transformarse en una instancia inolvidable en sus corazones.

Nota: Gentileza de Ediciones Especiales de El Mercurio de Antofagasta