CRÓNICAVisto 2476 veces — 22 junio 2012

Como Jefa comunal de una de las zonas donde se sitúa la mayor cantidad del mineral no metálico Litio, la alcaldesa de la comuna de San Pedro de Atacama, Sandra Berna Martínez,  ha señalado no ver con buenos ojos lo que se viene para el litio. Señalando como un mal precedente lo sucedido con el salitre en el país, donde las riquezas del  pueblo chilenofueron explotadas de tal manera que más que desarrollo y riquezas sólo dejaron un triste y prolongado recuerdo en quienes vivieron la época del denominado oro blanco.

 Es por esto, que tras el anunció del Presidente Piñera sobre el inicio del proceso de apertura de licitaciones para explotar el litio en cualquier territorio del país a excepción de algunas concesiones mineras, la alcaldesa de la comuna Sanpedrina ha sido enfática en señalar que es necesaria la consulta al pueblo Lickan Antai, a toda su gente Sanpedrina,   específicamente a sus habitantes que viven y trabajan de la pequeña industria turística, que lamentablemente podría desaparecer por la industrialización de la zona.

Hoy, al contrario de lo que se cree, Chile sí explota el litio, siendo uno de los principales productores en el mundo llegando a alcanzar un volumen extractivo del 43% anual y con una reserva estimada en 1500 años hacia adelante. El duopolio en esta actividad también se hace presente, dividiendo la producción entre  la Sociedad Química y Minera de Chile (SQM) de origen privado y la Sociedad Chilena del Litio (SCL), estatal.

A pesar de que las empresas podrán comprar este derecho al Estado por un monto de 2.500 millones de pesos, y una vez que comiencen las faenas, un royalty del 7% pagado todos los meses de las ventas brutas del mineral, la  edil de la comuna perteneciente al Salar con uno de los mayores recursos de litio, señala “No se nos ha tomado en cuenta, acá se ha hecho vista gorda al pueblo Lickan Antai y todos sus habitantes, al área de desarrollo Indígena, un área que significa un espacio territorial donde los organismos de la administración del estado han formalizado demandas e información en beneficio del desarrollo de los indígenas y sus comunidades”.

Agrega además “acá el problema es de fondo, nos encontramos en una zona aparentemente desértica, pero con un delicado ecosistema que de producirse una explotación descontrolada de los recursos minerales, podría desaparecer por completo, dañando la vida de los pobladores, la flora y fauna  y afectando directamente a la principal fuente de ingreso de la comuna, que es el turismo, creo y siento que con las empresas que hoy intervienen ya es suficiente”.

Como en muchas oportunidades la edil apoyará   y se unirá a cualquier petición de las  comunidades locales y habitantes de la comuna  por  exigir  al gobiernoque cualquier actividad industrial en la zonas de territorio indígena, ya sea exploración y explotación del litio,   sean consultadas y comunicadas a la población, consulta que además es avalada desde el 15 de septiembre de 2009, fecha en que entrara en vigencia el Convenio 169 de la OIT, único tratado internacional vinculante orientado a los pueblos indígenas y que naciera además en respuesta a muchas mesas de trabajo realizadas por los pueblos indígenas como es el caso de “La mesa de verdad y Nuevo Trato”, donde se hablara mucho del respeto al pueblo indígena”

El convenio 169, además considera el derecho de utilización, administración y conservación de los recursos naturales por parte de los mismos pueblos indígenas, los que deberán ser consultados por la eventual utilización de sus recursos naturales. Este  Convenio también establece que los Estados deben proteger los recursos naturales de los pueblos indígenas de su uso indebido y velar porque estos contribuyan al desarrollo de dichos pueblos.

“No quiero el día de mañana,  estar llorando por que se va el Litio y no queda nada en San Pedro de Atacama”, señaló la edil.

Si bien es cierto,  el Gobierno actual no ha trabajado en un protocolo o las formas de como llevar a cabo la consulta previa libre e informada a los pueblos indígenas, Berna Martínez no descarta que al igual que en muchos otras regiones indígenas donde se encuentra este recurso mineral en el mundo, haya que recurrir a instancias legales superiores para que tal consulta se lleve a efecto.

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