SALUDVisto 2676 veces — 06 mayo 2020

A cualquiera le puede suceder que el trabajo le cae encima como una avalancha y, cuando nos damos cuenta, se nos pasó la hora del almuerzo y no nos hemos hecho cargo de tomar decisiones al respecto. Lo más razonable sería que, con antelación, pudiéramos preparar algunas cosas para que nuestro futuro sea más fluido y nos genere menos estrés, al mismo tiempo que nos aseguramos de que nuestra alimentación se mantenga dentro de los parámetros razonables de lo saludable.

Prepara tu comida con antelación para varios días

Preparar varias raciones alguna receta que se adapte bien a ser congelada o refrigerada es una de las mejores cosas que podemos hacer para disminuir nuestro estrés y ajetreo del resto de la semana. Aparta un par de horas el domingo, sumérgete en el hashtag #mealprep y elige algo que se ajuste a tus gustos y preferencias.

Créate el hábito de llevar una fruta al trabajo cada día

Los snacks frescos y saludables son el caramelo de la naturaleza: además de sus múltiples beneficios para la salud son deliciosos y harán que no quieras comerte esa galleta o ese chocolate a media tarde.

¿No tienes tiempo de cocinar?

No busques una pizza congelada, pide algo saludable. El sushi tiene muchos beneficios para la salud, y al mismo tiempo es divertido y delicioso de comer. Muchos restaurantes, como Niu Sushi, ofrecen delivery con PedidosYa, con lo cual incluso si se te olvidó planificar ese día, podrás tener una comida saludable en tus manos en menos de una hora.

Haz la compra del súper sabiamente

Prepara una lista de acuerdo con las comidas que quieres hacer durante la semana, no compres con hambre, y evita los artículos innecesarios o poco saludables. De este modo, siempre tendrás comida sana al alcance de tu mano, lo que hará menos probable que elijas una opción más fácil, pero peor para tu cuerpo.

Lee las etiquetas

Las etiquetas nutricionales de los alimentos contienen mucha información que solemos ignorar, como cuánto es una ración, y los ingredientes que contiene lo que estamos comprando. Así, por ejemplo, veremos que el pan “integral” que compramos en realidad contiene más harina de trigo simple que integral, y que además le añaden grandes cantidades de azúcar, o que el cereal “de dieta” termina teniendo también más azúcar que el de colores que le damos a los niños. Evitar directamente los alimentos procesados, e incorporar todas las frutas, verduras y proteínas sin procesar que podamos es el primer mejor paso hacia una alimentación más saludable.

Calcula cuánta agua debes tomar

Aquello de los “dos litros al día” no es más que una guía general, que debe ajustarse a cada persona, a su cuerpo y a su estilo de vida. Calcula el agua que necesitas y asegúrate de tomarla, porque la mayoría de las personas están permanentemente deshidratadas y confunden la deshidratación con el hambre. Tomar suficiente agua ayuda al organismo a regularse en todos los sentidos, incluyendo el no comer en exceso y de manera innecesaria.

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