Un camión grúa totalmente incendiado, un acoplado (cama baja) con daños irreparables y otro camión desmantelado forman parte de las pérdidas que sufrieron dos empresarios transportistas de Antofagasta.
“Lo más insólito de todo esto es que estas acciones vandálicas ocurren a un costado de la Quinta Comisaría de Carabineros. ¿Cómo es posible que no haya existido ningún tipo de resguardo ante situaciones vandálicas de este nivel?”, se pregunta Héctor Ramírez Rojas, empresario y especialista en logística de transporte de maquinaria pesada.
Estos hechos ocurrieron en abril del año pasado. “Hace casi un año la empresa Transportes Segovia contrató nuestros servicios de flete para trasladar un camión Mercedes aparcado en el ex Vivero Municipal. Este vehículo debíamos trasladarlo hasta el Parque del Recuerdo. El camión se encontraba en evidente mal estado. Por ejemplo, ya le habían robado algunos neumáticos y otros elementos más”.
Ramírez comentó que para trasladar un camión de 18 toneladas se requiere una cama baja, es decir un remolque de plataforma baja que es trasladado por un tracto camión (que son los más adecuados para todo tipo de cargas pesadas y materiales de grandes dimensiones). “En el trayecto Carabineros controla al chofer de mi empresa y retiene ambos vehículos. Lo anterior a raíz de que un tercero alertó a la policía uniformada que estábamos robando un camión. A 11 meses de lo ocurrido nadie se responsabiliza por estos hechos. Nuestro camión, marca Volvo, ha sufrido serios daños. Se robaron la batería, los computadores, cortaron el ramal eléctrico, el estanque de petróleo, cadenas y neumáticos de repuesto. Y todo esto ocurrió frente a una comisaría de Carabineros”.
El empresario detalló que el camión grúa transportado tiene un costo de $150 millones; el camión Volvo junto a la cama baja están valorizados en $120 millones. Si se considera –añadió- el costo en pérdidas de uso y arriendo de estas maquinarias por un periodo de 11 meses, el perjuicio global es de, al menos, mil millones de pesos.
ORDEN DE RETIRO
La abogada Andrea Quiñones informó que en tiempo y forma hemos presentado todos los antecedentes necesarios para acreditar las propiedades de cada uno de los vehículos y las autorizaciones para poder movilizarlos. “Una vez esclarecido todos los hechos estamos en proceso de obtener la orden para retirarlos. Ya tenemos la orden de uno de los camiones (Mercedes)”.
Enfatizó que sorprende la vulnerabilidad de un sector aledaño a la policía uniformada. “Pese a encontrarse en este lugar, constantemente pasábamos por este sector con el propósito de revisar las condiciones de ambos camiones. Eran objetos fáciles de ser dañados, desmantelados. Lamentablemente nos informó un tercero que uno de los camiones (Mercedes) fue incendiado. Luego de los hechos, llegamos hasta la comisaría. Nadie se responsabilizó. Funcionarios dijeron que no se habían percatado de este incidente. Al acercarnos a revisar ambos camiones nos dimos cuenta que, además de ser incendiados, ambas máquinas también fueron desmanteladas. Creemos que para borrar cualquier huella se procede a la quema de estos vehículos”.
La abogada precisó que un perito del Poder Judicial asistió al lugar de los hechos en calidad de ministro de fe, quien levantó un acta de los daños totales que sufrieron los vehículos.
“Nadie se quiere hacer responsable de lo ocurrido. No se quiere hacer responsable Carabineros. No se quiere hacer responsable la Fiscalía, organismo que dio la orden que ambos vehículos debían quedar retenidos en la Quinta Comisaría. Tampoco se hace responsable la municipalidad por ser este lugar un sitio público también”, concluyó la jurista.