Alcalde, Aliro Catur, ampliará soluciones comunales, tras implementar una batería de acciones de reactivación en los ayllus, agricultura y comunidad; con la entrega de forraje, alimentación, protección y abrigo.

La noche del jueves 31 de enero quedará marcada en el calendario de las lluvias estivales y en la memoria de San Pedro de Atacama, luego del desborde de los ríos Vilama y San Pedro, y horas continuas de intensas precipitaciones. Mientras la emergencia asomaba, al interior del municipio el alcalde, Aliro Catur, se contactó sin demora con el intendente de la Región de Antofagasta, Marco Antonio Díaz, informando urgentemente la necesidad de accionar las medidas necesarias para atender y comenzar a solucionar sin demora los efectos que se producirían fundamentalmente en vivienda, conectividad y sociales.

Al día siguiente, a primera hora, Díaz desplegó un contundente gabinete regional en la comuna oasis. Fue la primera señal de las gestiones conjuntas entre el alcalde y el intendente.

A tres semanas de las inundaciones y afectaciones familiares, el catastro realizado por las direcciones de Desarrollo Comunitario (Dideco), y Obras, y la Secretaría Comunal de Planificación Comunal (Secplac); indican que los efectos del paso del agua o crecidas de río fueron considerables (como en la ruta a sur de Toconao con tres cortes y desvíos importantes), casas con distintos grados de daños, y grupos familiares y personas damnificadas (habilitando albergues en Toconao y San Pedro de Atacama, hoy desactivados).

Recursos inmediatos

En este sentido, el alcalde de San Pedro de Atacama, Aliro Catur, apuntó que se procederá a ingresar proyectos de emergencia a la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere), dado el decreto de Estado de Catástrofe, solicitud de recursos con asignación inmediata, tras el ingreso de las carpetas y requerimientos que indicará Secplac municipal. En este sentido, sostuvo una reunión con el director regional de Antofagasta de Subdere, Ronny Maldonado; abordando los procedimientos y plazos administrativos.

En este marco, Dideco levantó un catastro mediante la Ficha Básica de Emergencia (Fibe), la que permitió diagnosticar los requerimientos a atender y solucionar, información que se entrega al Gobierno para la evaluación y determinación de los recursos a disponer para solucionar las necesidades originadas durante el invierno estival más fuerte de los últimos 50 años.