Parlamentaria RN subraya que Calama fue declarada zona saturada por material particulado y que dicha ampliación es “un despropósito”.

La diputada de Renovación Nacional por Antofagasta, Paulina Núñez anunció el envío de una batería de oficios que buscan paralizar la ampliación de la Planta de Reciclaje de Baterías usadas de plomo-ácido en la ciudad de Calama.

Según argumentó la parlamentaria, “Calama es zona saturada por material particulado, y ampliar esta planta de reciclaje es un despropósito. Cuando una zona es declarada saturada, es decir, las normas de calidad medio ambiental se encuentran sobrepasadas, lo que procede es trabajar en un plan de descontaminación y mitigar todas las fuentes de contaminación detectadas; y no ampliar tratamientos de residuos peligrosos susceptible de generar un mayor impacto ambiental negativo. Debemos avanzar y no retroceder”.

“A mi juicio. -continuó-, la ampliación de la Planta debió presentarse a través de un Estudio de Impacto Ambiental y NO de una Declaración de Impacto Ambiental, y es por eso que hemos despachado desde la Cámara de Diputados diversos oficios: Uno, a la Contraloría General de la República, para que se pronuncie sobre la resolución de admisibilidad del Servicio de Evaluación Ambiental, ya que a juicio nuestro debió proceder un estudio y ellos debieron rechazar la declaración”.

“El segundo oficio está dirigido, al Servicio de Evaluación Ambiental, para que suspenda la evaluación del proyecto, hasta que la Contraloría se pronuncie. Y una veintena a los Servicios Públicos con competencia en materia Medio Ambiental y que participan del proceso de evaluación”, detalló.

Asimismo, Núñez manifestó su molestia con la visión centralista en la toma de decisiones y exigió un “mejor trato”. “Tener que ampliar esta Planta para recibir las baterías usadas en Santiago raya en no entender que Calama exige un mejor trato, y no un desprecio como estamos leyendo en la ampliación de esta Planta”.

“Recordemos que esta planta fue aprobada antes de que Calama fuera decretada zona saturada y, si bien, puede eventualmente funcionar de la mejor forma, cuestión que aun no sabemos porque también hemos oficiado para tener claridad de esta situación a todos los servicios con competencia que son parte del proceso de evaluación, el sólo Decreto nos debe llevar a mitigar estos procesos en la zona y no a ampliarlos. Por muy inocuo que sea un proyecto, la prudencia aconseja que en una zona saturada se privilegien los estudios de impacto ambientan antes que las declaraciones”, finalizó.