POLÍTICAVisto 1103 veces — 19 septiembre 2012

Un llamado al gobierno a apoyar un proyecto de acuerdo que solicita al Ministerio de Salud la ampliación en la entrega de alimentación complementaria en los colegios hizo el diputado, Pedro Araya.

El parlamentario dijo que el MINSAL debe extender el Programa Nacional de Alimentación Complementaria (PNAC), de modo que se siga otorgando el beneficio de la comida para niños mayores de 6 años, que ya han ingresado a la educación básica en las familias de más escasos recursos y en la proporción correspondiente a las raciones fuera de los horarios en que se encuentran en los establecimientos educacionales, extendiendo el beneficio durante toda la enseñanza básica.

Expresó que “esto es con el objetivo de permitir que se continúe con una buena alimentación durante las horas en que no están en los colegios”. Además indicó estar preocupado “por la calidad de la comida que están recibiendo hoy los niños que ingresan a la educación básica y que por ende dejan de percibir los beneficios del mencionado programa, lo que no les permite tener una correcta alimentación en los horarios en que se encuentran fuera de sus escuelas”.

El proyecto señala que “la importancia que tiene la alimentación de los niños a lo largo de su infancia, la cual incide en diversos ámbitos de su desarrollo tanto físico como intelectual, y por ende afecta de manera directa los procesos educativos y cognitivos. Así es reconocido por el propio PNAC, el cual entrega alimentos desde principios del siglo pasado con el fin de propender a la adecuada nutrición de la población, especialmente de aquellos que no disponen de los medios necesarios para procurársela por sí mismos”.

“De este modo, hoy se encargan de entregar complementos alimenticios para madres embarazadas y niños de hasta 6 años.  La actual normativa que fija el Programa hace extensivo este beneficio para niños de hasta 6 años de edad. Cumplida esa edad, dejan de ser beneficiarios del Programa. No obstante esto, es evidente que la necesidad de que continúen recibiendo una alimentación adecuada persiste con posterioridad a esa edad, siendo que el desarrollo de los niños continúa y por ende resulta esencial contar con una buena alimentación que les permita su óptimo estado tanto físico como intelectual”.

Agrega que “el fundamento que se da para que la entrega de alimento tenga como límite los 6 años es que a dicha edad los niños ingresan a la educación básica, por lo que son los establecimientos educacionales muchas veces los encargados de asegurar la debida alimentación de quienes estudian ahí durante los años siguientes. En efecto en los liceos y escuelas, son ellos los encargados de entregar los alimentos necesarios para sus estudiantes y así lo hacen en la práctica por medio de los Programas de Alimentación Juvenil”.

“Que según la ley, la jornada escolar completa diurna para los cursos de 3º a 8º básico es de 38 horas de trabajo escolar, mientras que para los de enseñanza media es de 42 horas. Para estos efectos se entiende por hora de trabajo escolar, 45 minutos. Por lo tanto, si dividimos esas 38 horas en 5 días de la semana, da un total de 7,6 horas académicas, lo que llevándolo a horas cronológicas da un total de 5 horas y 42 minutos diarios. Por ende, si un niño ingresa a las 9 AM al liceo, se retirará aproximadamente a las 4 PM considerando recreos y horas de colación”, dice el texto.

Señala que “es por ello que la alimentación desde esa hora en adelante vuelve a corresponder a los padres de los menores, quienes muchas veces con esfuerzo logran llevar un plato de comida adicional a sus casas. La condición económica de varias familias incide en que no son capaces de costear la alimentación para sus hijos fuera del horario de clases, es decir, niños que dejan de comer o que comen deficientemente después de dejar sus establecimientos educacionales por motivos económicos”.

Indica que “la estadística dada a conocer recientemente por la Subsecretaría de Salud conforme a la cual la adhesión al programa ha bajado cerca de un 10% (80 mil niños menos) respecto del año pasado. Entre las probables razones de esta baja participación, el Subsecretario de Salud, Jorge Díaz ha indicado que uno de los factores sería una mejora en la capacidad económica de las familias. Por otro lado, con el objetivo de recuperar a quienes se han restado del sistema es que el presupuesto destinado a este Programa aumentó en 3 mil millones para este año”.

Compartir

About Author

iphonerodrigo